A veces, cuando quieres a alguien tienes miedo de hacerle daño o de perderle. Te callas muchas cosas o por el contrario dices de más. Es ahí donde se comienza a vivir en un mundo extraño, diferente a la realidad y ambos comienzan a hacerse daño por el simple hecho de amarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario